En 1976, AMC presentó el CJ-7, la séptima generación del vehículo original y el primer cambio importante en el diseño de Jeep en 20 años.
El CJ-7 tenía una distancia entre ejes un poco más larga que el CJ-5 para dejar espacio para la transmisión automática. El CJ-7 presentaba aberturas de las puertas cuadradas a diferencia de las del CJ-5 que eran redondeadas. Una manera rápida de distinguirlos.
El que hemos tenido ocasión de fotografiar para la revista, pertenece a José, con el que tuvimos ocasión de profundizar un poco en la historia de este coche.
La unidad que os traemos, fue comprada al ejercito norte americano e importada a Cataluña, donde participaba en concentraciones de coches americanos y kdds. El coche fue vendido a un chaval de Marbella, que tras ver que no estaba en buenas condiciones, decide venderlo, y formaliza la compra con José en Sevilla, una hora estuvo el anuncio puesto.
El coche se lleva a un taller de Almoradí, especialista en coches americanos y ahí empieza la restauración de este Jeep. El objetivo, convertir un coche rudimentario y duro hecho para cualquier terreno, en un coche para el día a día.
Modificación de motor para lograr más potencia, llantas, ballestas, pintura, cromados, paragolpes, tapizados e incluso el volante que es más pequeño. No es que quede demasiado de la versión original en lo que accesorios se refiere, pero por lo que podéis ver la esencia la mantiene y sigue siendo brutal.
